martes, 23 de abril de 2013

Mentiras en la red



No sé de qué forma ha llegado hasta mi grupo de amigos de Facebook una página que se hace llamar Queimpresionante.com, pero dadas sus últimas publicaciones, pienso que debería llamarse Queimpresionantesmentiras.com. Y me explico sin más dilación y con algunos sugerentes ejemplos. Vayamos con el primero. 
La imagen: tres amigos junto a una playa, fotografiados de espaldas, observando el vaivén del mar. La frase que acompaña esta bella instántanea es: según un estudio realizado por... (Dios sabe quién), la amistad sólo puede prolongarse de cinco a siete años.  Valga otro ejemplo para rematar el engañoso adoctrinamiento. La imagen: una pareja en actitud romántica; la frase: según los psicólogos, la pasión, el enamoramiento sólo puede durar un año. Con estas rotundas sentencias, ya empiezo a sentir un cierto vértigo y la bilis despierta mis higadillos. Otro ejemplo: la imagen: un cigarrillo de marihuana cortado por la mitad; la frase:  un cigarrillo de cannabis contiene el  mismo alquitrán que quince cigarrillos de tabaco.  Y una  última muestra; la imagen: unos bellísimos ojos azules; la frase:  diversos estudios demuestran que las personas con ojos azules aprenden más y son mejores en los exámenes  que las personas  con ojos oscuros. 
Y me digo: ya está bien. Hasta aquí hemos llegado en este día de turbia primavera. Los autores de dicha página se deben pasar el día cantando aquella vieja melodía de ahora vamos a contar  mentiras trailará, trailará. 
La ventaja que tenemos las personas que soportamos ya unos cuantos años sobre el alma, es que sabemos bien que hay amistades que duran toda una vida, desafiando al tiempo, a la distancia, y a la rutinaria vida cotidiana. Los que ya peinamos alguna que otra cana, soterrada bajo el tinte barato de deliplus, percibimos que hay pasiones eternas, pertinaces, profundas como simas, luminosas como amaneceres veraniegos. Hay incluso amores que desafían la enfermedad y la muerte, pasiones que aparentan ser cenizas cual ave Fenix pero aún guardan fuego en su interior. 
Respecto a la tercera imagen que he descrito - el cigarrillo de cannabis-, es posible que sea cierto que un porro contenga el alquitrán de quince cigarrillos comunes,  pero no se por qué subjetiva razón los editores impresionantes no dicen que la marihuana, que produce euforia en un principio,  puede llevar a la ansiedad, al sueño o a la depresión cuando pasa su efecto. En ocasiones, puede producir sensaciones de temor, desconfianza y pánico. Fumar asiduamente marihuana entorpece la coordinación, el equilibrio y el tiempo de reacción, y por lo tanto afecta al movimiento, a la conducción y a los reflejos. Por último, aunque podría decir mucho más. el humo de la marihuana contiene el 70 por ciento más de sustancias que causan cáncer que el tabaco. 
Respecto al último punto, y aunque este comentario moleste a mi querida amiga Ampa que tiene los ojos más azules del mundo, no creo que el color de los ojos influya en el resultado de los exámenes, a no ser que el catedrático de turno sea un pervertido. Y si eso es cierto, pues que viva la raza aria y a los que tenemos los ojos oscuros que nos pongan a picar piedra en la cantera. 
En resumen, para impresionar al gentío facebuquero, molar, destacar, no es necesario decir tantas mentiras. Un ejemplo: una señora que en esta mañana  de domingo ha estado escribiendo este texto indignado mientras tendía al sol el contenido de una lavadora de seis kilos. Eso sí que es impresionante. Lo demás son patrañas. 

1 comentario:

  1. A mí lo que me impresiona es tu aguante. Que hayas tenido tanto aguante leyendo esas "informaciones". Y el entrecomillado obedece, no a las materias comentadas, sino a la falta de la más elemental justificación de esas aseveraciones.

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